8 beneficios del journaling y cómo empezar a incluirlo en tu vida
Para mí, el journaling es como la versión adulta de “mi querido diario” que nos permite vaciar los pensamientos intrusivos, tener una mayor conexión con nuestra realidad pero también organizar nuestro día a día con mayor claridad para evitar sentirnos abrumados en el día.
Si te da curiosidad pero no terminas de animarte a hacerlo, hoy comparto contigo 8 beneficios del journaling y cómo empezar a incluirlo en tu vida.
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¿Qué es el journaling?
Concretamente el journaling se refiere al hábito diario de dejar por escrito -en papel o electrónicamente- nuestras ideas, pensamientos y la lista de cosas que queremos o debemos lograr.
Como ves, es un espacio que nos damos para practicar libremente la escritura expresiva y reflexiva, es un espacio donde no nos juzgamos y que nos ayuda a entender cómo estamos percibiendo ciertos aspectos de nuestra vida, a tener en mente lo que queremos conseguir y hábitos que queremos mantener, así como a organizar mejor el día a día y no abrumarnos con la sensación de que tenemos millones de cosas por hacer.
Pero sin duda, lo que considero más importante de esta práctica, es que la hagamos con intención, las intenciones pueden ser desde jerarquizar las cosas que tenemos que hacer para sentirnos menos ansiosos en el día, puede ser aclarar nuestra mente para procesar mejor lo que pasa en el día, vaciar nuestra mente de pensamientos intrusivos, agradecer las cosas que hemos logrado y los pequeños instantes de felicidad diarios; todo esto puede hacer que la escritura se vuelva curativa.
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Beneficios del journaling
El journaling está asociado con la salud mental por los grandes beneficios que tiene la escritura. De hecho, muchos especialistas lo recomiendan a pacientes con ansiedad y depresión.
Y, si bien se puede hacer tanto de forma digital como manual, la verdad es que se consiguen MEJORES RESULTADOS cuando se hace de forma manual; con lápiz y papel, a la vieja escuela.
Esto último fue una de las cosas más interesantes que he descubierto de esta práctica. Cuando lo supe, me sorprendió darme cuenta de lo potente que puede ser escribir a mano.
Pero, ¿por qué es bueno hacer journaling?
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Meditación: el journaling se puede convertir en una forma de meditación mindfulness muy sencilla de seguir. De hecho, también se le llama “mindful writing” o escribir conscientemente.
Ayuda a reducir la ansiedad y los pensamientos depresivos: Hay muchos estudios, entre ellos este estudio de 2006 de Stice, Burton, Bearman y Rohde que sustentan este hecho. De hecho, se ha demostrado que llevar un diario te permite plasmar los pensamientos negativos o intrusivos que puedas estar experimentando para procesarlos de una manera analítica y no emocional y así responder mejor a ellos.
Mejora la capacidad cognitiva: el journaling no solo fortalece el área del lenguaje, según la Dra. Marta Ochoa, jefa del servicio de Neurología de HM Hospitales en Madrid, al escribir a mano se activan muchas redes neuronales y, en consecuencia, mejora nuestra capacidad cognitiva. Además, también recalca que esta actividad fomenta la memoria prospectiva y de trabajo.
Ayuda a cultivar la disciplina: según la Asociación Americana de Psicología, cultivar el hábito de escribir en un diario, aunque no sea todos los días, es una herramienta que nos anima y nos ayuda a entrenar la disciplina para tareas más complejas.
Mejora la memoria: la Dra. Ochoa recalca que la activación de la memoria es uno de los beneficios más importantes de escribir a mano en un diario. Esta actividad estimula la memoria semántica porque cuando escribes en un diario, no solo estás recordando ciertos eventos sino que los estás registrando, reflexionando sobre ellos y procesándolos, lo que te ayuda a retenerlos mejor en la mente.
Nos ayuda a crear hábitos permanentes: el journaling es también una herramienta muy buena para hacer ejercicios de visualización. Además, escribir en papel esas “tareas” o hábitos que quieres integrar a tu vida, hace que tu cerebro las catalogue como “acciones importantes” y es más factible que cumplas con ellas en el día. Lo que sucede es que tu sistema activo reticular (SAR) las archiva como acciones que DEBES lograr.
Permite dormir mejor: Tan solo 10 minutos de journaling pueden impactar positivamente en tu sueño porque, al hacerlo, podemos procesar y sacar de nuestra mente cualquier cosa estresante para dormir mejor y más ligeros. En lugar de agarrar el teléfono antes de dormir, mejor enfocarnos en procesar el día antes de descansar.
Ayuda a cultivar la gratitud: al ver en papel las pequeñas victorias diarias, los momentos breves de felicidad, las personas y las cosas con las que cuentas a diario, podrás ver tu vida con otros ojos y a cultivar el agradecimiento. Sobre esto, numerosos estudios han demostrado que la gratitud tiene beneficios específicos para la salud y promueve el bienestar a largo plazo.
¿Qué otros beneficios del journaling conoces tú?
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¿Cómo empezar a hacer journaling?
Necesitamos hablar de esto.
Como probablemente te haya pasado a ti, yo también estaba consciente de muchos beneficios del journaling pero no terminaba de aplicarlo en mi vida porque no sabía por dónde empezar.
¿Qué debo escribir?
¿Cómo lo hago?
¿En qué momento?
Yo no tengo tiempo para eso.
Estas son algunas de las cosas que pensamos antes de siquiera intentarlo.
Pero la verdad es que al ser nuestro espacio, nosotros ponemos las reglas y te doy algunas recomendaciones que seguro te ayudará a comenzar a hacer esta práctica:
Busca privacidad, trata de escribirlo en tu habitación o en un espacio calmado de tu casa, pero hay quienes lo hacen hasta en el baño. Hacerlo a solas es importante para escribir sin juicio ni censura.
Olvídate de los errores tanto ortográficos como de puntuación y no te preocupes por utilizar palabras complicadas o grandilocuentes. Este espacio es para que dejes fluir las ideas.
Intenta reservar un momento del día para escribir. Aunque parezca que no tenemos tiempo, si nos planificamos bien, podemos tomarnos 5 minutos al despertar y 5 antes de dormir o reservar 10 minutos en cualquier momento del día para hacerlo.
Póntelo fácil y hazlo siempre en un mismo lugar, esto te permitirá tener siempre tu bolígrafo y tu cuaderno de journaling y gratitud siempre a mano.
Piensa en el journaling como un momento para ti, para hablar contigo, para conectar contigo y para cuidar de ti.
Tener una estructura te ayuda a no tener que pensar todos los días en qué escribir o perder tiempo en decidir por dónde empezar. Elige un cuaderno que te permita tener esa estructura y que te permita hacer un journaling guiado.
Como tú, yo también le di mil vueltas antes de comenzar a hacer journaling; probé hacerlo por mi cuenta, con agendas, con cuadernos vacíos y de muchísimas otras maneras y se me hacía un poco complicado ser constante o conectar verdaderamente con esta práctica.
Por eso, hace más de un año me atreví a crear mi propio cuaderno de conexión personal: ✨Un momento para mí.✨
Este cuaderno nace de mi propia necesidad de encontrar un espacio donde conectar con mi voz, con mis pensamientos, donde pudiera establecerme metas realistas para mi día y crear hábitos permanentes. Además de poder ejercitar el músculo de la gratitud que tanto me ha ayudado a afrontar momentos difíciles.
Está inspirado en la persona que, como yo, no tiene demasiadas horas en el día para conectar consigo misma y que está buscando un apoyo y guía que se ajuste a su ritmo de vida.
Te quita la presión del tiempo porque no viene con calendarios y puedes hacerlo cuando puedas o lo necesites, y además te facilita decidir qué escribir porque viene con preguntas sencillas para completar.
Si quieres empezar, estoy segura de que Un momento para ti va a ser tu aliado perfecto.